Santo Domingo, República Dominicana.- Henry Urrutia jugó por primera vez en el invierno en Venezuela, en la temporada 2015-2016. Fue la primera de cuatro campañas, que todavía recuerda con particular estima, en especial su paso por Cardenales de Lara.

Ahora, el jardinero y primera base cubano forma parte del roster de Gigantes del Cibao, equipo con el que conquistó el título en la LIDOM.

Desde el terreno del estadio Quisqueya-Juan Marichal recordó su paso por la LVBP.

“En mi primera temporada reforcé a Leones del Caracas y me fue muy bien. Una fanaticada muy bonita y muy buena vibra, en el Estadio Universitario. Al siguiente año me dieron reléase (le dejaron en libertad), bastante rápido, para mi parecer, y entonces decidí regresar al año siguiente con el equipo Cardenales”, destacó.

En dos años con los melenudos (2015-2016 y 2016-2017), el toletero zurdo .276/.328/.420 y .748 de OPS, en 174 turnos, con tres jonrones y 27 remolcadas, en 47 juegos. Estadísticas que no presagiaron lo que vendría después. En la campaña 2017- 2018, Urrutia fue campeón bate, con elevado promedio de .385, mientras empujaba 41 anotaciones, en 54 desafíos con la enseña de los pájaros rojos. Hasta ahora su mejor cosecha en el Caribe.

Así que, para el antillano, Cardenales fue el equipo en el que mejor se sintió en Venezuela, pese a que el torneo siguiente, confesó, que tuvo momentos difíciles con el madero sobre todo después de las trágicas muertes de Luis Valbuena y José “El Hacha” Castillo.

“Aunque mi relación con la gerencia era normal, la química con el equipo fue algo increíble. Estuve con otro club en Venezuela, pero me atrevería a decir que son muy pocos equipos en el beisbol que tienen ese tipo de química en el clubhouse, como la de los muchachos de Lara y la fanaticada todavía, en este momento, me escribe para preguntarme cuándo vuelvo”, contó.

Sobre su interés de ir a jugar a Venezuela, aunque fuese con una organización diferente a la barquisimetana, afirmó: “Mi paso por Venezuela terminó con Lara porque sé que no me voy a sentir bien jugando con otro equipo en contra de ellos. Tengo a Cardenales en mi corazón y eso no lo cambiará nadie”, puntualizó.

Urrutia destacó que ha estado en contacto con los equipos venezolanos. “Hubo acercamientos con Lara, pero no logramos concretar y decidí quedarme en México y cuando quedé libre allá, les escribí a Cardenales pero nada pasó. Magallanes me contactó, pero decidí firmar aquí en Dominicana”, reveló.

El experimentado paleador, que actuó en las Grandes Ligas con los Orioles de Baltimore, entre 2013 y 2015, aclaró que la decisión de volver a Venezuela ahora es un tema de conveniencia. “Cumplí 34 años de edad y estoy en la recta final de mi carrera, entonces quiero dejarla en el mejor lugar posible, ya no se trata solo de lo económico, sino del futuro y las oportunidades”, aseveró. “Jugar aquí en Dominicana me está abriendo muchas puertas. Hay personas mirándome en Asia, en Triple A (MLB), cosas que pensé que no se daría en este momento de mi carrera”.    

Sobre sus planes a futuro destacó que hasta ahora lo más seguro es regresar a México con Saraperos de Saltillo.

“Es una ciudad que me encanta y mi relación con la gerencia es buena. Quiero esperar a ver que va a pasar. Estoy viendo qué opción tomar porque tampoco me quiero ir a Triple A y no jugar”.

Mientras llega ese momento aprovechará de despejarse “Voy a estar un mes libre de vacaciones con mi familia y luego tomaré la decisión”.